Después del fuego arrasador, la naturaleza muestra su resiliencia en el Iberá
GENERAL12/03/2022María del Carmen Ruiz Díaz"La fauna y la flora en la zona de los esteros del Iberá se van recuperando solos, por así decirlo, por la impresionante resiliencia que tiene la naturaleza, sin dudas tiene un poder de recuperación enorme. Además, el mayor porcentaje afectada es la zona herbácea o de pastizales que, también, es mucho más rápido de recuperarse. En cuanto a la fauna, al no quemarse de una sola vez, en la mayoría de los casos les permitió trasladarse", contextualizó el intendente del Cuerpo de Guardaparques de la provincia de Corrientes, Walter Drews, a Quintaesencia ante la consulta cuál era el estado de situación en el parque provincial Iberá.
En esa línea, dijo que no se debe perder de vista que el corazón del gran humedal está compuesto por muchos embalsados que poseen la característica de una gran esponja que se encontraba inmersa "en una especie de palangana con poca agua o vacía pero que al prenderse fuego se prologó por varios días, en especial porque el fuego se propagó en forma subterránea, pero las recientes lluvias lograron extinguirlos".
Además, Drews recordó que toda esta situación se ve agravada por el déficit pluvial que atraviesa la provincia de Corrientes desde hace al menos dos años.
No obstante, puntualizó que decenas de ejemplares de varias especies murieron como consecuencia del fuego, "en tanto que parte de la avifauna logró salvarse ya que tuvo la posibilidad de escapar a tiempo, tanto es así que en algunas zonas en las que los incendios arrasaron, ya empezaron a verse algunas aves emblemáticas para los esteros como el yetapa de collar o el tordo amarillo, no en grandes cantidades a la que estábamos acostumbrados, pero sí una cantidad suficiente, lo que da cuenta de que tuvieron la posibilidad de huir de las llamas. Y precisamente a eso me refiero con la resiliencia que tiene la naturaleza".
Yetapá, una de las especies que volvió a
ser vista en zonas de incendios.
A pesar de esa buena noticia, indicó que en relación a los bosques nativos sí hubo algunas zonas en las que se vio muy afectada, "y ahí el daño puede ser un poco mayor, aunque en los grandes montes, afortunadamente las llamas no ingresaron".
En cuanto a aquellas zonas del parque que padeció en mayor medida la sequía, el intendente de Parques y Reserva de la provincia dijo que allí hubo mayores pérdidas, pero las densidades poblaciones pueden ser diferentes, ya que la fauna siempre se ubica en zonas próximas a los espejos de agua.
El fuego y el guardaparque
En cuanto a cuál fue el rol que cumplieron los guardaparques durante los incendios, Drews comentó que ellos no podían apagarlos, pero sí colaboraron con la Administración de Parques Nacionales en virtud de que la zona del parque nacional Iberá fue el más afectado. "Además, aquellas zonas del parque provincial que fue afectado, son lugares casi inaccesibles porque en muchos lugares hay una barrera natural que impedía el acceso", agregó.
"Por lo tanto, nos tocó sumar nuestro aporte haciendo un trabajo de soporte logístico, por ejemplo, en Colonia Pellegrini había más de 300 brigadistas provenientes de distintos puntos del país. En Centro de Visitantes se armó un centro operativo desde donde se trabajó y coordinó las acciones de las brigadas de Córdoba, San Luis, Chaco, entre tantos”, comentó el intendente.
Los guardaparques provinciales tuvieron la misión de asistir y coordinar acciones con brigadistas de todo el país.
Mensaje
En el tramo final de la charla telefónica con Drews, dijo que su mayor interés en relación a esta grave situación que atravesó la provincia y cuya recuperación va a demandar seguramente muchos años, "es dejar un mensaje al vecino, al turista, a todos, de que se debe prestar atención cuando se da a conocer una alerta en relación a la sequía y extremar la precaución a la hora de hacer uso del fuego, así sea al prender una pequeña fogata para calentar agua".
"No debemos perder de vista que, si a la naturaleza no la cuidamos entre todos y en especial en estas circunstancias, la cosa se pone difícil. Pero, además, debemos prestar atención a todos los mensajes que nos da la naturaleza cuando tomamos malas decisiones y, por ejemplo, hacemos una ruta o una canalización en un lugar equivocado y sin tener en cuenta el lugar, seguro que la fuerza de la naturaleza se va a encargar de hacérnoslo saber", concluyó.
Más de un millón de hectáreas quemadas
Un informe difundido por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), confirmó que, hasta el 27 de febrero pasado, la superficie quemada en todo el territorio alcanzó 1.042.514 hectáreas (ha), es decir un 12% de la superficie total. No obstante, hay que tener en cuenta que, en la última semana, primera de marzo, en algunos sectores de la provincia existían aún focos activos de incendios, por lo que esa cifra podría verse modificada y aumentar.
Los datos fueron aportados por el Grupo de Recursos Naturales de la Estación Experimental Agropecuaria Corrientes, que en su trabajo determinó que la cobertura vegetal más afectada detectada es la de esteros y otros bañados que pasaron de 275 mil hectáreas a 333 mil. Los pastizales en tanto, los del noroeste pasaron de 145 mil ha a 156 mil ha, mientras que los pastizales del nordeste de 40 mil hectáreas a 58 mil.