Imanes para la abundancia

Hace un tiempo ya, llevamos adelante un Ciclo denominado “INVERTIR180: Conectándonos con la Abundancia y la Prosperidad” y como vamos a repetirlo próximamente en Corrientes, comparto un breve espacio de una constelación.

Sabemos que “nuestra vida  es el reflejo de lo que no se ve”. De allí que te invitamos a invertir tu mirada y recordar que las personas y las empresas somos como Imanes. Atraemos aquello en lo que nos enfocamos tanto lo bueno como lo malo.

Caso # ABUNDANCIA / ESCACEZ. En un encuentro, T plantea que necesita ver su relación con el dinero porque desde que tiene uso de razón, nunca LES ALCANZÓ (generaliza). Entonces pregunto: ¿Qué se decía en tu casa sobre el dinero?  Pués, sabemos que nacemos en un sistema familiar que ya trae una cultura, que genera en nosotros patrones de conducta. En estos patrones que se comienzan a dar, uno investiga y se da cuenta cual era la relación de nuestros padres con el dinero, aparecen temas de lealtades, amores ciegos, etc. Y si no tomamos CONCIENCIA DE ELLO seguimos repitiendo.

La ABUNDANCIA (en sus múltiples facetas: emocional, laboral, económica, vincular, etc.) RIQUEZA, PROSPERIDAD tiene que ver con un tema de CONCIENCIA y GRATITUD.

Cabe reflexionar ¿Cómo me relaciono yo internamente con la abundancia, dinero o prosperidad? Porque mi mundo interno es la manifestación externa de lo que me pasa en la vida.

El punto de partida es que la energía del dinero es una energía de agradecimiento. El dinero es energía: una energía que fluye constantemente. Cuando hay pensamientos limitantes y de escasez ante nuestras posibilidades económicas, estamos bloqueando ese flujo de energía sin ni siquiera permitirnos ver si era posible conseguir lo que necesitábamos o queríamos en ese momento.

Generalmente, asociamos el dinero con eventos pasados o inclusive mensajes que escuchamos desde niños, como: “Esa persona es egoísta/creída/pesada porque tiene dinero”; “el dinero no es fácil de obtener” o, “la vida es difícil y hay que trabajar duro para sobrevivir”.

Puede ser que en tu casa haya habido situaciones en las que tus padres se peleaban por dinero o quizá un divorcio que se tornó difícil por el tema económico y por ello asocias el dinero con esos eventos negativos. Quizá, de adulta, has tenido que depender de tu esposo y no ha sido fácil mantenerte económicamente independiente, y por ello has limitado tu abundancia económica.

Hay muchas razones por las cuales tenemos ideas distorsionadas hacia el dinero, que nos llevan a tener pensamientos de escasez y actuar de cierta forma que limita nuestras posibilidades. Cuando esto ocurre, la energía que está relacionada con el dinero se estanca y ya no estás dando ni recibiendo y en el proceso.

Invitamos a T a mirar a su Clan (familia) y asentir todo como fue, permitiéndose traer la abundancia y prosperidad. De esta manera, se sana el vínculo y se transmuta la  conciencia hacia la prosperidad y la abundancia. Dando  un paso  a un nuevo transitar con más liviandad y fluidez.

EL DINERO NO SE ACABA; como nuestra energía, este va y viene. Es nuestra obligación REVISAR nuestras creencias dejando que la energía realmente fluya y nos traiga mayor abundancia.

La naturaleza nos proporciona todo lo que necesitamos, y esa plenitud la hemos experimentado en el seno materno. Donde toda la nutrición se nos fue dada sin que nosotros tuviésemos que hacer nada.  

Llegar a esa CONCIENCIA que todos hemos tenido ABUNDANCIA, es una retrospección que los invito a hacer. 

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