Bert Hellinger dijo una vez: "La constelación familiar existía antes que yo, solo me encontré con ella". Esta frase sirve de ayuda para introducirme en el siguiente caso, que nos sorprendió hace muy pocas semanas.
Nos sorprendió digo, porque conocemos estrechamente al consultante, quien es un destacado y prestigioso profesional y nos manifiesta que desea involucrarse en política, siente que no quiere estar al margen y que aspira a un mejor país para sus hijos. Su gran duda es, si sería un buen candidato y si está preparado.
# Caso Incursión en la Política# La primera pregunta que le hacemos a P es: ¿te nació a vos o fuiste convocado?, ¿Hay alguien en tu sistema familiar que haya estado participando en política antes?
P mueve los ojos buscando hacia atrás tratando de encontrar algún referente en sus ancestros y no recuerda a nadie. Entonces recordando que “el ser humano compensa lealtades inconscientes de toda la historia familiar” lo invitamos a que investigue e interrogue a sus parientes vivos.
Vuelve con la información que un bisabuelo era un caudillo que cuando estaba por postularse para un cargo lo mataron, que nadie hablaba de él porque era muy joven, lo consideraban un “rebelde y soñador” en su familia. Ni siquiera recordaban el nombre.
Las constelaciones funcionan en la manera en que se hace explícito lo implícito. Esto nos orientó hacia una implicación sistémica.
Resuelto esta vocación de servicio del sistema -ahora explicita- integramos, reconocimos y honramos el destino de ese excluido y nos adentramos a resolver su segunda inquietud: ¿Estar preparado? ¿Ser buen candidato?
En este caso, trabajamos presencialmente e invitamos a P que transite un tetra lema. El resultado fue que SI podía ser candidato pero que le faltaba “algo más” y eran “nuevos recursos”. De la grilla de recursos: humanos, financieros, habilidades y conocimientos, señala que la debilidad estaba en este último. CONOCIMIENTOS.
Uno se preguntará ¿es posible, siendo tan buen profesional? Es sabido que, ser bueno en “algo” no significa estas preparado para todo. Y P es consciente que no hay margen para la buena voluntad, los buenos gestos y un dejo de improvisación.
Los diferentes “canales “por los que llegamos a contar con esa posibilidad de servicio, nos obliga a reflexionar si es “conveniente, oportuno y necesario” incorporar nuevos aprendizajes, habilidades y conocimientos que, “desde una honestidad intelectual”, nos HABILITE para ejercer con idoneidad ese rol, función o cargo al que aspiramos o ejercemos.
Con la misma solvencia que nos da un título profesional (docente, medico, abogado, ingeniero, etc.) u oficio (electricista, maestro mayor de obras, etc.) es iluso y falso pensar, que ese título u oficio ampara y sustenta las capacidades y conocimientos que demanda una posición en la administración y gestión de las políticas públicas. Se necesita aprender sus particularidades, sus códigos, sus procesos y contextos.
Estamos viviendo en un entorno complejo y volátil y las personas esperan soluciones de individuos preparados a quienes apoyaran con sus votos. La eficiencia del uso del tiempo de un “servidor público” que posee CLARIDAD Y ENFOQUE, beneficia a la Comunidad, ahorra dinero y recursos y contribuye a direccionarlo con sabiduría a demandas concretas y no “imaginarias”
Cerrando con las palabras del Maestro:
“A veces pensamos que la vida nos pertenece, o que podemos hacer con ella lo que queramos. Probablemente es más cierto lo contrario: nosotros somos los que pertenecemos a la vida que, querámoslo o no, tiene sus reglas, llenando de dicha a quien, humildemente, recoge todo de quienes le precedieron, reconoce a todos su lugar y se abre a intercambiar y a transmitir lo recibido. La pretensión de otra cosa solo acarrea, como atestiguan diversas tradiciones, la expulsión del Paraíso” (B.H)
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Mirtha Inás Bouille es Coach y Constelaciones Sistémicas; creadora del "Método Invertir 180"; trainer en Abundancia y Prosperidad.
La podés encontrar en Instagramam como Invertir 180.