Hacer hablar a las paredes, cantar a las personas mientras leen y revalorizar el lenguaje, son algunas de las cosas que suceden y provocan las intervenciones callejeras de Yurú Chupita. Las responsables de esta propuesta son Eme y Eli, dos amigas correntinas que decidieron en agosto del año pasado, comenzar con un proyecto de producción e impresión de carteles que -un poco jugando y otro poco enserio- representaran a Corrientes y a los correntinos con frases y estribillos de chamamé.
En una entrevista por videollamada con Quintaesencia, uniendo Corrientes con Buenos Aires, las creadoras del proyecto vandal sentimental, cuentan cómo nació la idea que en poco tiempo tomó forma y salió a la calle, para hacerse ver y ganar espacios públicos y también, meterse adentro de hogares.
“Somos amigas desde hace más de 10 años”, cuentan después de hacer memoria recordaron que se conocían de vista desde la escuela, pero luego se encontraron en la facultad. La entrevista conectó a las amigas, una desde su departamento en Buenos Aires (Eli) y la otra, desde el patio de su casa en Corrientes (Eme). Ambas con mate en mano, indicaron qué en medio de la pandemia, un flayer donde una gráfica de Buenos Aires anunciaba que realizaba combos para emprendedores debido a la crisis y posible cierre del comercio, despertó el interés y el resto es historia conocida, pero que ellas detallas entre risas de lo que fue un proyecto que hoy gana espacio y conquista corazones.
“Una noche me llamo Eli, y me contó esto y comenzamos a pensar que podía decir, porque queríamos decir algo y ya teníamos la materia prima”, resume Eme y luego Eli agrega, yo hacía rato quería emprender con algo pero nada me cerraba mucho, con Eme, somos amigas pero nunca fuimos socias, esa noche nos quedamos hablando hasta tarde, y le dimos formas, carteles y murales en los que poner frases que nos recuerden a Corrientes, porque había algo que nos conectaba, cuando estábamos lejos de Corrientes, siempre usábamos frases o palabras que muchas veces solo nosotros entendíamos, también nos pasaba mucho que en reuniones con correntinos poner un chamamé era estar un poco en nuestra tierra y nos llenaba el corazón”. Y así, nació la idea que tiene como base común, sus respectivos conocimientos de diseño.
“Todo comenzó siendo un poco lúdico, desde pensar el nombre hasta algunas de las frases, habían días que hablábamos más entre nosotras que con la familia, pero así fue tomando forma y salieron las primeras tiradas de carteles, con frases de canciones y frases que creamos nosotras, siempre usando el lenguaje de manera romántica, ese creo que es nuestro sello identitario”, cuentan y destacan que entre las frases de esa primera tirada estuvieron, “Un tere, mbeju y vos”, “Que ganas de gritar que yo también nací en la ribera azul del Paraná”, “Traigan el vino más fino, tráiganlo acá”, “Para salvarse hay que juntarse y arremangarse Neike Chamigo”.
“Los carteles fueron saliendo y rápido la gente se fue copando, quienes estaban pasando la cuarentena lejos de su casa en Corrientes, nos decían que los carteles les daban alegría, nos empezaron a llegaron muchos mensajes y entendimos que hacíamos más que carteles, estábamos dando alegría, revalorizando esas frases que las escuchamos de nuestros padres y de nuestros abuelos y las estábamos llevando a las calles a las casas de la gente, poniéndole nuestra impronta”, resumen.
Usan el hastag vandal sentimental, ¿a qué se debe?
Hace algún tiempo Eme escribió un posteo en el que explica cuál es el sentido de la palabra vandalismo para nosotras, no significa que pegar un cartel sea dañar el espacio público, en este caso lo vemos como aportar valor, mucha gente grande nos dice que los lee cantando, eso es lo que buscamos.
Al igual que en un posteo -remarcan ambas- luchamos por llenar las calles y los espacios de mujeres y disidencias con sus propios proyectos, por la igualdad de los derechos y roles. Creemos que desde nuestro lugar podemos plantar semillas. Soñamos un mundo donde las paredes estén llena de arte y no de caras de pibas que nunca llegan a sus casas.
Quizá el fragmento resuma un poco lo que hacen dos mujeres de 31 años que deciden vandalizar desde el amor, desde la comunidad y con conciencia social. Al escucharlas, se comprende que el proyecto logra canalizar aquellos que muchas y muchos piensan, pero que pocos se animan a llevarlo a la práctica.
Hace poco vimos que decidieron ponerle cara al proyecto, ¿a qué se debió?
Nos pasaba mucho que nos escribían para pedirnos carteles o para mandarnos mensajes que les gustaba lo que hacíamos y nos decían “chicos”, y entendimos que debíamos decir, somos mujeres que salimos con carteles, rodillo, cola vínica, sonrisa y en bicicleta a pegar carteles, porque parece que el espacio público es solo de los hombres, pero ahí estábamos nosotras, que también recibimos bardo de gente cuando lo estamos haciendo y que tenemos que bancar, asique aunque no nos gusta mucho, decidimos comenzar a sacarnos fotos, hacernos visibles.
El Chango Spasiuk se sacó una foto con uno de sus carteles y pasó de todo.
Sí, esa noche no lo podíamos creer, no sabíamos que el Chango estaba en Corrientes, cuando vimos el posteo con el cartel de “Chamigues el payé del Paraná”, nos alegramos mucho, porque la verdad es que usar lenguaje inclusivo en nuestra gráfica es algo que nos pareció importante, es algo que es parte de nuestra realidad, lo hacemos desde el respeto y desde el amor, hubieron comentarios negativos, pero siempre los hay y lo entendemos, nos quedamos con la felicidad que una figura del chamamé le dijo sí a Yurú.
Algunas de las frases de los carteles de Yurú son: La Siesta de nuestro amor; Así ndae chake piena Katu; Me dijeron que la vida solo es vida si hay amor, yo te juro que mi vida, no es vida si no estas vos; Chamigues el payé del Paraná; Angá vocablo guaraní traducción: pobre, desprovisto, miserable; Angá ni 5 para la SUBE; Angá mi vida; Angasitx, entre otras. Muchas de ellas se leen en carteles, murales, cuadernos y stikers.
Por estos días, muchos de sus carteles están pegados en las calles correntinas y también de Buenos Aires, mientras que la demanda aumenta por parte de quienes han llevado su oficina al hogar y buscan decorarlas con los este tipo de carteles.
La cuenta de Instagram del proyecto vandal sentimenta es @yuru.chupita