La inexplicable explicación del amor

Sabes, se me ocurrió consultar en el buscador de la Real Academia Española el significado de “amor” y estas son los cuatro principales resultados:

1. “Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser”.

2. “Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear”.

3. “Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo”.

4. “Tendencia a la unión sexual”.

Luego me puse a pensar acerca de cada una de esas definiciones, y noté serios inconvenientes para  encuadrar el amor en una de ellas. Te propongo, pensemos una a una, y vos que estás del otro lado, verás si estás de acuerdo o no con mi análisis.

Vamos con la primera: “Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser”. Confieso que esta definición me chocó bastante ni bien la leí, porque me resultó algo carente de optimismo que se defina al amor desde la falta. Esto claro que tal concepto se remonta a una teoría antigua en la que las personas venimos al mundo de por si incompletas y que buscamos a otra persona para completarnos, de ahí esos términos tan usuales y reiterativos como “alma gemela” o “media naranja” pero… no es un tanto pesimista vernos a nosotros mismos como incompletos. Porque en definitiva, no me cabe duda que vos o yo nos podemos bastar a nosotros mismos sin estar anclados a nadie, y si nos vinculamos con otras personas, será acaso porque nos sienta bien, porque nos mejora, pero nunca porque nos completa.

Aparte te comento como dato adicional que esta teoría se desarrolló por primera vez en una obra de Platón. Para resumírtelo En “El Banquete” el gran filósofo griego nos narra un dialogo entre varios de sus personajes, en el que uno de ellos en forma bastante jocosa cuenta que en un inicio del mundo cada ser humano tenía dos cabezas cuatro brazos y cuatro piernas, que cada ser era doble, algunos eran varón- mujer, otros varón-varón y otros mujer-mujer, y que esos seres eran sumamente felices y poderosos, pero intentaron revelarse contra los dioses y estos, por castigo, los partieron por la mitad, y de allí que al día de hoy buscamos nuestra otra mitad. Esta tesis “vendió” bastante en la literatura luego, pero ni siquiera se puede comprobar que haya sido la postura que el propio Platón sostenía. 

Veamos la segunda definición: “Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear”.

Podrá tener más contenido que la otra definición pero vuelve a caer en lo mismo, ese “nos completa”  es problemático, insisto como ya dije en el caso anterior, que ya estamos completos y retiro los mismos fundamentos. Además  también me hizo ruido el “procurando reciprocidad en el deseo de unión”, ¿acaso nunca han amado a alguien que no les corresponde y aun así, le han amado? ¿Incluso aun sabiendo plenamente que nunca habrá tal reciprocidad, continuaron sintiendo eso que llaman amor, pese a que continuamos sin saber qué es el amor?

Continuemos con la tercera de estas definiciones: “Sentimiento  de  afecto,  inclinación  y entrega a alguien o algo”. Confieso que esta me gusta un poco más, no obstante también presenta dificultades, el amor puede ser algo distinto a un sentimiento, pues puede involucrarse elementos racionales. Además si es solo un sentimiento, tampoco podríamos asegurar que sea solo afecto, inclinación o entrega como indica la definición. El amor puede contener pasión y no solo es entrega a la otra persona sino que también, en paralelo se le exige a ese alguien, sino seria mera devoción u sumisión.

La cuarta definición de por si resulta incompleta, repasémosla: “Tendencia a la unión sexual”. Claramente muchos podrán objetar que el amor no es solo sexual incluso que puede haber amor sin sexo.

Todo esto me lleva a pensar ¿realmente se puede englobar el amor en una definición? 

Hay conceptos que claramente aun no pueden encuadrarse en una definición y posiblemente nunca podremos definirlos. Lo curioso con el amor es, que el amor lo vivimos a diario, que está entre nosotros que lo percibimos pero no podemos explicarlo.

Y entonces, ¿no será que el amor es aquello que vos definas? No pretendo relativizar el amor, al decir esto pero si flexibilizar un poco su esencia para poder adecuarlo a cada una de nuestras experiencias personales, por ejemplo la tuya que seguro ya tendrás bien formada.

Si en definitiva, no todo tiene porque ser igual para todos, menos con algo tan íntimo como el amor, entonces porque nos preocupamos por querer definir algo que no podemos ponernos de acuerdo respecto a que es….

A lo mejor, sí podemos fijar algunos lineamientos, a lo mejor digo, podemos estar de acuerdo en que el amor es bello, en que nos satisface cuando es correspondido y que nos hace daño cuando no es correspondido, y porque no podemos acordar que modifica nuestra percepción del ambiente en que nos movemos. Pero hasta ahí, solo lineamientos muy generales podremos acordar. 

El resto serán verdaderos interrogantes a los que nos acostumbramos a tener ahí, sin respuesta alguna que nos cierre, sin palabras que nos identifiquen. ¿Es tan difícil vivir con algunas incógnitas?  ¿O acaso es peor no vivir por pretender despejarlas?

Por eso, te propongo que dejemos de buscar una definición uniforme o modelo, y tengamos la apertura espiritual y mental para entender que el amor es un concepto amplio y con matices, que se procesa en el interior de cada uno de nosotros, con luces y sombras, por lo que tienes que ser vos quien definas que entiendes por amor, libre de ataduras de cualquier respuesta de manual.

Y si no quieres definirlo o no sabes definirlo como a mí me pasa no importa, solo vívelo entonces de la forma que mejor te siente, de aquella forma que vos sabes que te hace feliz.

Muchas gracias por ceder parte de tu tiempo para leerme, espero que mis palabras hayan contribuido a alegarte el día. Si gustas, puedes seguirme en Instagram, me encontrarás como @german91. Me despido, no sin antes desearte lo mejor en tu vida.

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