Un gallo, un gato, mascotas de un edificio con historia

Mientras en la mayoría de los hogares, las familias deciden tener una mascota, en otros son los animales quienes adoptan a sus dueños. Pero, la historia que te queremos contar en esta oportunidad en Quintaesencia, tiene su cuota de curiosidad, ya que se trata de un gallo muy especial, que decidió quedarse a vivir en el patio de un conocido e histórico edificio correntino.  

El hecho se da en el edificio Libertador (avenida Pujol y Uruguay) y tiene como protagonista a un gallo que hace unos 6 años llegó, cuentan los vecinos, volando por el muro. Conocer los pormenores de la historia fue posible gracias a la charla con varios habitantes del lugar, el personal de seguridad y de consorcio, quienes todos los días conviven con la particular mascota. Que un día llego para quedarse y si bien muchas veces se preguntó en el barrio si pertenecía a alguien, nunca se presentó ni un dueño.  

Quienes visitan el lugar, se sorprenden al ver caminar orondo al animal por el hall del edificio, haciendo gala de su plumaje brillante y una cresta elegante. Al consultar como se llama, las respuestas fueron múltiples: “En realidad nunca le pusimos un nombre, hay quienes le dicen Petiso, otros simplemente Gallo y quienes aseguran que su nombre es Felipe”, cuenta al pasar uno de los porteros de la propiedad horizontal. 

Uno de los vecinos del lugar, quien al ver el interés de esta cronista nos invita a pasar al patio del edificio para conocer la casa de Felipe, allí todo cobra sentido, el animal no solo eligió el lugar, sino que decidió quedarse ya que el espacio cuenta con un extenso predio con pasto y abundante vegetación. 

“El anda por todos lados, en esta zona hay un gato que también es de todos, pero el gallo es el dueño del espacio y si el gato quiere venir, lo corre. Acá le dan comida y el hace su vida con total tranquilidad”, resume el hombre quien no duda en agregar: “Todos lo queremos muchísimo, nos acostumbramos a su presencia y la gente se sorprende pero para nosotros es muy normal”. 

Pero no todos los comentarios son alegres, es que el gallo es el despertador oficial de lo más de 30 departamentos del edificio. "Entre las 6 y las 6.30 su canto te despierta todos los días, los que estamos acá desde que el llegó estamos acostumbrados, pero los inquilinos nuevos suelen enojarse, más de uno se quejó y pidió que lo saquen, pero no lo vamos a permitir, es más le estamos buscando novia”, deslizó uno de los vecinos consultados por esta revista. 

Es que según detallan, tras la llegada del gallo, poco después unos vecinos del lugar trajeron unas gallinas blancas, “pero no sabemos qué pasó con  esas, ahora queremos que nuestra mascota tenga novia y si hay alguien que tenga una gallina, se la vamos a comprar y les aseguramos que la vamos a cuidar”, insistió el hombre. 

Otro dato particular, es que el gallo siempre está atendido por profesionales ya que al estar ubicado cerca de la Facultad de Veterinaria, son varios los estudiantes que viven en el lugar y mantienen contacto con la mascota común. 

El edificio Libertador, tiene sus particularidades, haber sido construido con la intención de ser un hotel 5 estrellas lo hace especial en cuanto a sus espacios comunes, según cuenta los más memoriosos, la propiedad fue levantada para el Mundial 78', ya que se decía que Corrientes sería sede debido a la construcción de un estadio en terrenos de la UNNE, nada de eso ocurrió y el lugar se convirtió en un edificio de departamentos. 

Así, el lugar posee un gran patio como un espacio común, poco frecuente en propiedades horizontales. 

¿Conocías la historia del gallo del edificio Libertador?